Antes de tomar la decisión de modificar tu alimentación diaria, es importante que visites un médico y te realices un chequeo general para conocer tu estado de salud y si tenés alguna deficiencia nutricional o patología que pueda agravarse con el cambio al vegetarianismo (ej: diabetes, celiaquía, anemia, etc.). El segundo paso es consultar a un especialista en nutrición que pueda acompañarte y controlar este proceso. En nuestro equipo contamos con Eugenia Pogostkin, que nos guía para crear menús nutricionalmente balanceados.
Acá te dejamos 5 tips para implementar una dieta vegetariana:
1. Analizá tu alimentación actual
Para que tu paso hacia una alimentación vegetariana tenga éxito debés analizar tu dieta omnívora y, sobre todo, tomar conciencia de los alimentos y preparaciones que abundan en tu mesa. No será tan drástico el cambio si actualmente consumís gran variedad y cantidad de vegetales al día.
Es recomendable, antes de pasarte definitivamente a la dieta vegetariana, que hagas pequeñas incorporaciones de vegetales y legumbres, pruebes alimentos veganos, sustitutos de carnes y lácteos de origen vegetal, para ir acostumbrándote a su uso en la cocina y a su consumo cotidiano.
2. Elegí tu tipo de dieta vegetariana
En función del análisis anterior, es importante que decidas si querés seguir una alimentación vegetariana estricta o vegana (consumir solo alimentos de origen vegetal), o si vas a incluir determinados productos animales como huevos y lácteos (dieta ovo-vegetarianas, lacto-vegetariana u ovo-lacto-vegetariana).
También podés elegir una opción flexitariana, es decir, llevar una dieta vegetariana flexible y cada determinado tiempo o en eventos sociales, incluir alimentos de origen animal, pescado, o algunas carnes.
Mientras más limitada sea la dieta, más cuidados debés tener y una buena forma de comenzar este proceso es contratando un servicio de viandas que te ofrezca, al menos en una de las comidas, la dieta precisa que querés incorporar. Nuestro servicio te ofrece las viandas vegetarianas, que son equilibradas, variadas, y por supuesto, muy ricas.
3. Conocé los productos que vas a consumir
Es más fácil pasarte a una alimentación vegetariana si sabes qué productos usar, donde comprarlos y cómo emplearlos en la cocina. Aprender a cocinar puede ser un gran aliado en tu transición hacia el vegetarianismo. También ayuda identificar lugares para abastecerte de productos que reemplacen la carne, ya que, quiénes los venden también suelen ser proveedores de ideas y formas de utilizar los distintos ingredientes.
Algunos productos que podés usar:
- Tofu, seitan, tempeh
- Quínoa, amaranto, trigo sarraceno
- Germen de trigo, levadura de cerveza, maca, espirulina
- Frutos secos y frutas pasas
- Legumbres como el frijol, la lenteja, soja
4. Planificá para que no falten nutrientes en tu dieta
Como vas a restringir la selección de productos que componen tu alimentación, es fundamental planificar y organizar la dieta para que no falten nutrientes, y así prevenir carencias de vitaminas, minerales y/o proteínas que predominan en el mundo animal y pueden faltarte si consumís sólo alimentos de origen vegetal. Volvemos a recomendar el acompañamiento de un profesional de la nutrición que pueda evaluar tu proceso.
5. Hacelo de manera sostenible
Como verás, no es nada fácil modificar los hábitos. Te recomendamos que tomes todas las medidas necesarias para realizarlo de la forma más saludable y sostenida posible, ya que es un camino a recorrer con mucha responsabilidad.
Desde este espacio, alentamos el menor consumo de alimentos procesados y de origen animal, pero, para preservar la salud, no recomendamos hacerlo descuidadamente y sin tener los recaudos necesarios para no frustrarse o en el peor de los casos, caer en una deficiencia nutricional que genere mayores problemas a largo plazo.